Ponen proa al viento y también hacía sus sueños. No se detienen. A máxima velocidad continúan cumpliendo con los objetivos trazados y, regata a regata, evidenciando un constante y rápido crecimiento. Se trata de la dupla compuesta por el quilmeño Fernando Gwozdz y Tomás Dietrich que, en aguas del Río de la Plata y frente a participantes olímpicos y mundiales, se alzaron con la medalla de Plata en el Campeonato Sudamericano de la mítica Clase 470. Ya con la mira puesta en la clasificación a la final de la Copa del Mundo, el experimentado referente del Náutico Quilmes analiza el presente del equipo ARG 87 y adelanta sus próximos desafíos.

En el Sudamericano, que fue organizado por el Club Náutico San Isidro y dio puntos para el ranking de la International Sailing Federation, compitieron 13 equipos de Argentina, Brasil, Chile, Uruguay y Paraguay. Yendo de menor a mayor, la dupla nacional pudo cerrar su participación conquistando las dos pruebas del último día, lo cual les permitió escalar hasta el segundo escalón de la Clasificación General, culminando cerca de los cariocas Geison Mendes Dzioubanov y Gustavo Canal Thiesen. Sin dudas, un resultado que impulsa la labor del quilmeño y el rosarino, quienes hace pocos meses trabajan en este proyecto con el objetivo de representar al país en las principales competencias internacionales.

- ¿Los tomó por sorpresa este resultado?

- En realidad no porque conocíamos a los rivales y sabíamos que con un buen campeonato nos podíamos meter en el podio. Estuvimos terceros durante buena parte de la competencia, pero el último día nos soltamos y con dos primeros puestos saltamos al segundo lugar.

- ¿Sienten que van consolidándose como dupla más rápido de lo que pensaban?

- El crecimiento se viene dando muy rápido. Para dar un ejemplo, pensá que los dos equipos que completaron el podio tienen más de cuatro años navegando juntos y nosotros aún no llegamos ni a uno. Ojalá podamos seguir acortando distancias a este ritmo.

- ¿Cómo continuará su preparación y calendario de competencias?

- Ya comenzamos con otro bloque en el agua, mientras que la parte física en tierra prácticamente no tiene descanso. A fin de mes viajaremos a Europa para participar de tres torneos. El primero, en Palma de Mallorca. Los otros dos en Francia, en donde buscaremos la clasificación a la final de la Copa del Mundo.

Sin dudas, esta gran actuación en el Sudamericano, sumada a otros buenos resultados que vienen consiguiendo en los últimos tiempos, son un espaldarazo importantísimo para este nuevo proyecto que tiene muchos objetivos por delante. Y un sueño, que Fernando le comentó a DQ unos meses atrás y que sigue en pie más que nunca: “a lo largo de mi trayectoria deportiva me golpeé la cabeza contra la pared varias veces aspirando con poder llegar a un Juego Olímpico, por eso, en esta oportunidad, quiero ir paso a paso, un poco más lento, intentando cumplir con objetivos intermedios, antes de comenzar a pensar en Tokio 2020. Uno se ilusiona, pero tenemos que cumplir con las metas que nos planteamos para el año, hay que llegar lo mejor preparados posible y después se verá”.

De sueños se trata. Y con tan buen presente, Gwozdz se puede permitir seguir soñando.

“Un barco muy marinero”

El 470 es una clase de vela ligera reconocida por la World Sailing y que participa de los Juegos Olímpicos desde 1976. Fue diseñada en 1963 por el francés André Cornu como una embarcación con un casco moderno de fibra de vidrio y es considerada para navegantes avanzados, con un aparejo muy técnico que incluye trapecio. El nombre hace referencia a la longitud del barco en centímetros (mide 4,70 metros de largo).

- ¿Cuáles son las características más atractivas del 470?

- La puesta a punto del mástil, de las distintas configuraciones que tiene y que se navega en equipo, lo cual te permite aprender muchísimo. Además, tiene una variedad de opciones casi ilimitada de equipamiento. Esto, como deportista, te nutre de muchísimo conocimiento técnico, algo invaluable al pasar a otras categorías o al trabajar como entrenador. Por si fuera poco, se trata de un barco que tiene un rango de condiciones navegables muy amplio. Son pocos los días en los que uno no puede salir debido a las condiciones climáticas. En ese sentido, es un barco muy marinero.