Con el objetivo de conseguir una de las dos plazas para los Panamericanos del año que viene, La Garra encaró su participación en los Juegos Sudamericanos - Cochabamba 2018. Y después de cinco días ininterrumpidos de competencia, la Selección Argentina en la altura boliviana finalizó en la segunda colocación, consiguió lo que fue a buscar. Después de un buen rendimiento a lo largo del certamen, el equipo de la bernalense Manuela Pizzo, cayó en la Final con Brasil.

El camino del equipo de Eduardo Peruchena comenzó con contundencia. En el debut goleó a Perú 50-8 y quedó un solo tanto de igualar el record goleador histórico de la selección femenina argentina (51-22 ante Venezuela en el Panamericano de 2011). Al día siguiente enfrentó a otro debutante, el local Bolivia, al que venció 49-4 casi sin oposición.

Cumplidos los compromisos ante los rivales menos exigentes y con la clasificación a las semifinales asegurada, las chicas cerraron la primera ronda con un contundente triunfo 29-20 ante Chile, que se quedó con la medalla de bronce y jugará el repechaje que otorga un cupo para estar en la capital peruana.

Todavía con algún mal antecedente reciente dando vueltas por la cabeza, Argentina salió afrontar la seminal contra Paraguay con mucho en juego. Sufrió ante un enmarañado rival, pero finalmente pudo ganar 23-20, lo que desató un deshago en las jugadoras y el cuerpo técnico.

Ya con la presencia en Lima asegurada, en la final se topó con las favoritas: Brasil. Pese a jugar un mejor primer tiempo que segundo, las verdeamarelhas siempre dominaron el encuentro, para terminar imponiéndose por 26-12 y ganar por tercera vez la medalla dorada en los Odesur.

Con la tranquilidad del objetivo cumplido, a La Garra ahora la espera un calendario de trabajo con un 2019 en el que habrá mucho en juego: los Juegos Panamericanos, el clasificatorio y, eventualmente, el Mundial en Japón, mientras sueña con la ilusión de los Juegos de Tokio 2020.

Foto: COA