Hace mucho tiempo llegó desde Mar del Plata para radicarse en San Francisco Solano. Se trata de Ayelén Granadino, que el pasado fin de semana dio un paso importante en su reciente carrera profesional: venció por puntos, en fallo mayoritario, a la oriunda de Saladillo, Tamara Demarco, y se quedó con el título argentino minimosca que estaba vacante. Dentro de un combate parejo, las tarjetas fueron 95-95, 97-93 y 98-93, dándole el título a La Piru.

Demarco comenzó con mucha decisión el duelo, llevándose el primer round por escaso margen, con anticipos de zurda abajo y derecha arriba, quizás para borrar su caída frente a la misma oponente en su propio terreno natal un tiempo atrás.

El entrenador de Granadino, Osvaldo Falcón, le hizo cambiar constantemente de guardia para confundir, cambiando los ángulos de disparo, dándole excelentes dividendos por un buen rato. Más alta, larga y con una técnica superior, y con una velocidad acompasada de traslación, la solanense se amparó en los golpes largos para marcar diferencias round tras round.

Desde el 2° al 7° round, Piru hizo suyos todos los parciales con holgura hasta que cambió el aire y empezó a conservar. Ayudada por su rincón, compuesto por su marido y boxeador Pablo Battista, Demarco salió con todo y echó el resto en el 8° y 9°, complicando en la media y corta medida a una Granadino a quien no le sobraban piernas para impedir su acercamiento.

El último, por poco, fue para la flamante campeona que pudo alejarse, jabear y escapar.

Info: Quique Rodriguez

Foto: Cerca de Ring