“Contenta que me voy a quedar en casa unos meses. Fueron muchos años afuera y necesito descansar un poco. Por el momento planeo dedicarme de lleno a la selección y después llegará el momento de ver que hago”, comenta Pizzo en entrevista con DQ Radio (FMQ 93.5).

- Entonces, ¿no vas a tener equipo por estos próximos meses?

- No lo sé todavía. Me están llegando propuestas, pero estoy analizando todo de cara al futuro. Por el momento no quisiera irme del país.

- Y si llega a haber competencia local, ¿jugarías en algún equipo de FeMeBal?

- No sé. La liga local está parada e imagino que hasta agosto septiembre no va a haber actividad, por eso es algo que hoy por hoy no tengo en cuenta. Necesito unos meses para frenar y después ya veré que decisión voy a tomar.

- En caso que en algún momento tomes la decisión de irte de nuevo, ¿pensaste adonde te gustaría ir?

- Lo que tengo decidido es que ya a España no quiero volver, creo que se cumplió un ciclo. Gané tres ligas y no tengo más nada por dar ahí. Era momento de dar un paso al costado y buscar nuevos objetivos. Me gustaría vivir la experiencia de jugar en alguna liga más fuerte y en un país con otra cultura.

- ¿Cómo viviste esta última temporada en el Bera Bera donde, a pesar de los cambios en el plantel, terminaron arrasando y ganado la liga de punta a punta?

- Fueron dos años muy buenos. En el primero la liga se suspendió cuando apareció el COVID, pero como ya se había jugado más del setenta por ciento del torneo, la organización decidió darnos el título de campeonas. Para este último hubo cambios, pero el grupo se consolidó rápido. Después de caer en la Copa de la Reina que había quedado suspendida por la pandemia, el equipo no perdió un partido y terminamos la liga invictas. Fueron dos años consecutivos sin perder un solo partido, el último fue en 2019. Algún histórico para el club y que ningún otro equipo lo consiguió en España.

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- ¿Cómo fue la experiencia de vivir estos últimos años en el País Vasco?

- Es un lugar increíble, hermoso, sobre todo por la comida (risas).

- Te hicieron una despedida con mucho marisco…

- Si, fue una mariscada. Estuvo espectacular, mis amigas me cumplieron los gustos porque sabían que en Argentina iba a ser imposible que lo pueda repetir jaja

- ¿Esta etapa fue lo mejor de tu carrera a nivel personal?

- A medida que fui creciendo, fui creciendo como jugadora. Con mayor experiencia, pude disfrutar de todo lo que fui aprendiendo y, si bien disfruté cada lugar en el que estuve, es probable que en Bera Bera haya sido mi mejor etapa.

- Siete años en el exterior entre Brasil, Francia y España, ¿fue muy desgastante?

- Fueron muchos años. Es duro no poder estar en los eventos o las pequeños cosas que vivís con la familia y los amigos, extrañás un montón todo eso. Obvio que la recompensa es muy alta porque era cumplir un sueño. Pero se hace difícil con el paso de los años.

- Ahora se viene una nueva etapa en la selección, dejando atrás la frustración de hace unos meses atrás que no pudieron lograr la clasificación a los Juegos Olímpicos.

- Si, la pandemia nos jugó en contra. Veníamos de hacer un muy buen Mundial en Japón, mejorando el nivel, y que se haya suspendido todo, con muchas chicas que aún hoy todavía no pudieron volver a jugar, sumado al COVID y los contactos estrechos, fueron todos detonantes que nos sacaron posibilidades. Fue duro, pero no estábamos a la altura de una competencia de este nivel.

- Te transformaste en una referente, una de las líderes de La Garra, ¿te gusta o es una responsabilidad muy grande?

- No lo vivo como una presión. Es más, es una de mis cualidades como jugadora: tirar para adelante y unir al grupo. No lo llevo como una responsabilidad, lo disfruto.

- ¿El objetivo ahora es el Panamericano?

- Si, que va a jugarse en octubre en Chile y otorga plazas para el Mundial. Ya empezamos a entrenar en Ferro. Necesitamos competir porque es de la única manera que podamos seguir creciendo, tenemos muchas ganar de jugar.