Superando una dolorosa derrota en semis y el bajón anímico q esta provocó, el Seleccionado Femenino de Hockey se mantuvo firme a lo que marca su historia y volvió a meterse en el podio de otro torneo internacional: vencieron a la complicada Alemania por 3 a 1 y repiten la medalla de bronce por segundos Juegos consecutivos. Otro premio internacional para la quilmeña Mariné Russo.

Las ganas de Argentina desde el primer minuto fueron claves para sacra adelante un encuentro que en la previa parecía mucho más complicado de lo que resultó siendo. Es que, las chicas sabían que no podían dejar pasar la última oportunidad de subirse por tercera vez a un podio olímpico y eso quedó demostrado en la cancha.

El equipo se plantó en campo rival y presionó a la última línea alemana. Por eso, a los 11 minutos consiguieron la primera diferencia, a partir de un remate de Claudia Burkart que pasó por debajo de la arquera Reynolds, tras el tercer corner corto a su favor.

Pero esta mínima diferencia no las detuvo y Las Leonas fueron por más. Fue así que, Alejandra Gulla quedó de cara al arco alemán. La delantera argentina no definió bien, pero Carla Rebecchi estuvo atenta para tomar el rebote y llegar al gol. Así se cerró una primera mitad, con una notoria diferencia entre ambos conjuntos.

En la segunda parte, las alemanas salieron a vender cara su derrota y aprovechando el relax que se había tomado el equipo nacional, llegaron al descuento por medio de Anke Kühn.

A partir de ese momento, la Argentina se dio cuenta que era momento para defender y aprovechar alguna contra. Hasta que llegó el tercer gol, el de la tranquilidad definitiva. Otro corto, en este caso bien resuelto por Noel Barrionuevo, que con una arrastrada selló el 3 a 1.

De ahí en más, solo fue esperar el final para desatar el delirio. Tanta alegría sirvió para tapar la derrota frente a las holandesas y la imposibilidad de llegar por primera vez a la medalla dorada.

Seguramente, porque sabían que ya forman parte de la historia grande del deporte argentino.