En menos de dos años, se transformó en jugadora de selección. Historia particular la de Camila Rocío Bossolasco, que luego de un año y siete meses jugando al Básquet fue convocada para jugar junto a la Preselección Sub 13 de la Asociación Femenina Metropolitana. La Pivote es integrante del equipo del Quilmes Atlético Club que actualmente disputa el Torneo Metropolitano. Si queda entre las convocadas, ya tiene un importante certamen por delante.

Increíblemente, hasta hace poco no tenía mucha idea de lo que era el básquet. Pero un día empezó y se terminó atrapando. Esa es la particular historia de Bossolasco, una gigante de 180 centímetros de altura, teniendo en cuenta su edad. “Quería hacer deporte pero no sabía cuál. Un día mi hermana me preguntó qué me parecía si empezaba básquet, dije que sí y acá estoy”, afirmó la Pivote en declaraciones con el sitio oficial del Cervecero.

Su entrenadora en las categorías formativas, Clara Van Benthem, fue quien la llevó a entrenar al CeDem en donde se reunió con otras chicas de distintos clubes de la Asociación. “El primero que se enteró que fui preseleccionada fue mi papá (Alejandro), después mis hermanas (Sofía y Berenice) y mi mamá (Claudia). Todos me felicitaron. Fue un momento re lindo”, comenta.

Camila entrena todos los lunes en el complejo ubicado en Caseros y ya tiene una meta por delante: “Ojalá pueda quedar elegida para jugar el Torneo Argentino que se disputará en Diciembre”, comenta dejando al descubierto la alegría que genera un logro tan grande y que ella consiguió en tan corto tiempo.