No tenía demasiadas alternativas, su angustiante posición en la tabla, lo obligaba a ir por el único resultado que le servía. Y bajo la lluvia de una gris tarde de martes, Argentino de Quilmes goleó y superó con total justicia a Ituzaingó en la Barranca. El regreso al triunfo, otra buena imagen en casa, pero principalmente, el hecho de haberle descontado tres unidades a un adversario directo en la pelea por la supervivencia en la divisional, son los principales aspectos a rescatar para el conjunto dirigido por Santángelo.

Otra actuación convincente del Mate en su estadio, que sirve como síntoma positivo de cara a futuro. Queda claro que el equipo viene en alza, pero el lastre que arrastra por el pésimo arranque de temporada, lo obliga a mantenerse por esta senda hasta tratar de quedar mejor acomodado en la tabla de los promedios. Al menos, a esta altura del año, ya demuestra la posibilidad de estar en condiciones de involucrarse en la pelea.

El conjunto de la Barranca tuvo la posibilidad de ratificar su predominio en el juego antes que termine la primera mitad. Fue a los 31 minutos que llegó el primer gol, después de una gran jugada individual realizada por Walter Hermoso. Pero tuvo que esperar hasta el segundo tiempo, para dar por sentenciada la historia. A los 21 minutos, Hernán Centurión capturó un rebote y marcó el 2 a 0. Mientras que el tercero fue de Ramón Borda, a partir de un efectivo cobro, luego que el juez Rey Hilfer haya sancionado penal.

De esta manera, los dirigidos por Oscar Santángelo quedaron a un sólo un punto de su derrotado en la tabla de los promedios, además de acercarse a Liniers y Excursionistas. Pero principalmente, dándose vida y volviendo a creer en sus posibilidades. Y después de estar a punto de tirar la toalla, no es poca cosa.