Al ver su contextura física y la fiereza mostrada en su victoria por KO, la prensa nipona no dudó en apodarlo King Kong Baby. En aquel combate de octubre del año pasado, Mauro Herrera hizo historia al convertirse en el primer argentino en combatir dentro del circuito profesional japonés. Ahora, rankeado número tres de la Shin Nihon Kick Boxing Association, el luchador de Ihara Dojo regresará el 17 de abril al ring del mítico Tokyo Dome Korakuen Hall en la búsqueda de un triunfo ante el local Daisuke que lo posicione definitivamente como aspirante a la corona mundial.

- Esta será tu segunda pelea dentro del circuito profesional japonés, ¿qué sentís de cara a este nuevo desafío en el más alto nivel del kick boxing?

- Ahora sé bien donde estoy parado y la responsabilidad que tengo. Me siento ganador.

- Justamente, de conseguir la victoria, te posicionás para ir por el título…

- Voy para ganar este combate. El título va a llegar cuando tenga que llegar. Confío en mi trabajo, en mi entrenador -Diego La Volpe- y en mi equipo. Lo demás es cuestión de tiempo.

- En tu debut en Tokio te apodaron King Kong Baby y les respondiste con un KO. ¿Cómo te imaginás esta nueva presentación?

- De la misma forma, con otro KO. Quiero convencer y quedarme en el circuito. Esa es mi meta: mantenerme y que se respete a Argentina en este deporte. Somos de corazón caliente, eso el público lo ve y los organizadores también. Nosotros vamos siempre para adelante en las buenas y en las malas. Japón siempre respetó a los argentinos en el box, yo quiero ganar ese mismo respeto dentro del kick boxing.

Foto: Edgardo Gómez