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Un tiempo atrás, llegó a la redacción una información sobre un nadador quilmeño de 16 años que necesitaba un apoyo económico para poder ir a competir al exterior. Se trataba de Jonathan Gómez, un chico con hipoacusia bilateral profunda, que es figura dentro de su disciplina y un verdadero ejemplo de vida. Deportes En Quilmes sirvió de nexo entre Aldana, su mamá, y Raúl Molnar, director de Deportes de la Municipalidad, para analizar la posibilidad de un subsidio. Hoy, Jona tiene todo arreglado para viajar junto a Los Pulpos, la Selección Argentina de natación para sordos, a los XXI Juegos Sordolímpicos, que se realizarán entre el 5 y el 15 de septiembre en la ciudad china de Taipei. Un sueño hecho realidad.

- ¿Qué sienten después de tantos meses de lucha por tratar de alcanzar esta posibilidad?

- Una alegría enorme y también muchas ganas de seguir por más, ya que Jonathan tiene un gran futuro y ganas de nadar cada día más y más. Es lo que lo hace realmente feliz. La lucha es de toda la vida, desde que nació, así que es normal y estamos felices por el subsidio y también por conocer tanta gente amable y solidaria dispuesta a ayudar sin pedir nada a cambio, desde la Municipalidad de Quilmes a nadadores y entrenadores, a quienes les doy las gracias por interesarse en la historia de Jona.

- ¿El haber logrado clasificar a estos Juegos es uno de los logros más importantes de Jonathan en su carrera deportiva?

- El logro más importante es poder desarrollar su intelecto, explotar hasta el máximo su estilo de vida sano, lleno de expectativas hacia el futuro. También compartir con sus pares todos los viajes a las provincias, desde los primeros torneos de Independiente, hasta el maratón de nado especial en San Rafael, Mendoza. Además, nadó en aguas abiertas en Córdoba, Santa Fe, San Miguel del Monte y Valle Grande.

- ¿Es la primera vez que reciben un apoyo para poder competir?

- Sí, es la primera vez que recibimos apoyo, hasta ahora siempre tuvimos que pagar todos los torneos. El dinero cubre el viaje, estadía y el torneo en Taipei. Lamentablemente, no tenemos sponsors, a la Selección solamente le regalaron unas mallas. Lo que más necesitamos en este momento son zapatillas y ropa de gimnasia.

- ¿Cómo es la rutina diaria de Jona?

- Tenemos muchas necesidades pero siempre insistí para que él estudie y practique algún deporte, lo que le sirvió para integrarse al mundo de los oyentes. Se levanta todos los días a las cinco de la mañana para viajar a un colegio del Estado integrado con sordos en el barrio de Villa Crespo. Cuando sale, tiene otras dos horas de viaje, ni bien llega, almuerza, duerme un ratito y sale a entrenar sus dos horas diarias a la pileta del Club 12 de Octubre. Los sábados nada en el CeNARD.

- ¿Es un sueño cumplido el poder participar de un campeonato tan importante?

- Sí, es el gran sueño de Jona, viajar y llegar a cumplir su deseo más grande. Sin embargo, este sueño recién comienza porque tiene posibilidades de viajar a Atenas 2011, a Portugal y a Brasil. Todos deseamos que tenga la posibilidad de llegar a formar una buena carrera en natación, ya que es su fuerte.

- ¿Y para vos?

- Es un ejemplo. Le demuestra a todas las personas que piensan que una dificultad no permite desarrollar sus deseos, que hay que luchar y trabajar por sus sueños. Y si hay algún familiar de una persona con capacidad diferente, le digo que tome este viaje como un ejemplo para el futuro de sus hijos. Que se puede llegar muy, pero muy lejos con un hijo especial, trabajando duro y llevándolo a los mejores profesionales y escuelas. Que miren a mi hijo, y luchen por el suyo, los mejores momentos de satisfacción llegarán.

Colaboración: El Depornauta