Argentino de Quilmes no solo no pudo corregir el mal momento deportivo que le toca vivir, sino que profundizó su debacle futbolística en este arranque de temporada. El elenco de la barranca se presentó como local ante otro necesitado de resultados como El Porvenir y jugó un pésimo primer tiempo, en el que la visita debería haber sacado diferencias casi definitivas. Con ganas y amor propio lo intentó en la parte final pero no le alcanzo. Dos puntos sobre quince jugados.

Desbordado, sin ideas, impreciso… demasiadas cosas juntas para poder graficarlas en apenas unas líneas. Todo mal hizo el Mate en el tramo inicial. Al punto que, a los diez minutos ya los de Gerli habían contado con tres situaciones claras para anotar: un mano a mano, una mala definición entrando por el segundo palo, otro que dio en el travesaño y en el rebota la salvaron sobre la línea. En síntesis, un descalabro total.

Por eso, fue lógico que a los 19 minutos, la visita sacara diferencias en el tanteador. La apertura llegó gracias a un desborde de Hernán Pereira, el mediocampista metió un buscapié para Mariano Romero, que no dudó y definió con derecha. Pero el descalabro defensivo continuó después de eso y solo algunas buenas atajadas de Leguizamón y la pifia rival permitieron que la distancia no fuera mayor.

Producto del enorme desgaste y los nervios del momento que también venía transitando, El Porve bajó su intensidad en la parte complementaria. Eso, y los ingresos de Arias y Cristofanelli le dieron un mayor vigor al Celeste, que de cualquier manera, esporádicamente pudo poner en riesgo la valla rival. Con producciones individuales flojísimas (Sergio Escudero el peor de todos) y sin orden ni ideas desde el banco, el corolario de la tarde estaba claro.

Los pocos puntos y la pésima actuación mostrada hasta el momento ponen más en duda que nunca la continuidad de la dupla Vanadía-Maidana. Con el clásico ante Berazategui a la vuelta de la esquina, por estas horas nadie se atreve a confirmar que serán ellos quienes conduzcan al equipo en el partido más esperado de cada fixture.