El arranque ideal, quizás hasta mejor de lo pensado. Frente a un rival que se presentaba ante su gente por primera vez después de haber sido campeón en la Primera División, Quilmes se hizo fuerte, jugó un buen partido, convirtió dos golazos y provocó la mayor sorpresa en el inicio del campeonato, al derrotar a Tigre en su cancha. Supo sacar la diferencia, por momentos controló el trámite y cuando se quedó con diez, supo aguantarlo pese al descuento.

Demasiado golpeado llegaba el hincha del QAC a este cotejo e impensadamente, se dio el primer gusto grande de la temporada. Es que además de las dificultades que presenta todo estreno oficial, también había que tener en cuenta que se medía contra un rival imponente, que traía encima un presente glorioso y una desmesurada ambición por tratar de retornar pronto a la máxima categoría.

Pero el Cervecero nos e amilanó ante esos condimentos. Siempre bien parado, supo cómo ir tejiendo su juego y, en una brillante jugada colectiva, toda a un toque, consiguió llevar la pelota hacia la izquierda, bajarla al medio tras un centro pasado, para el ingreso de Drocco que se la llevó bien y definió cruzado. Golazo. Durante el rato posterior supo como enredar al rival y, el cierre de la etapa sería a todo trapo: tiro libre desde la derecha que ejecutó Fede Alvarez con extremada potencia para vencer las manos de Marinelli.

Todo se le volvió muy cuesta arriba a Tigre, que entró dormido en el segundo tiempo. Lo aprovecharon los de Lemos que dominaron la escena y contaron con varias ocasiones para estirar la cuenta. El partido venía bastante tranquilo hasta que, en apenas seis minutos, Alejandro Altuna vio dos veces la tarjeta amarilla y el QAC debió fortalecerse defensivamente ante la decisión de ir al frente de los locales.

Pese a que le costó seguir metiendo contras y el balón quedó en poder de los dirigidos por Gorosito durante todo el tiempo, solo algún envío cruzado terminó generándole mucho peligro (en uno de ellos, Denning se pierde una situación increíble al estrellar la pelota al palo). Faltaban menos de cinco minutos y un centro bien ejecutado por Cachete Morales fue peinado por Prost, que batió la valla propia. Fue un cierre emocionante, en el que la visita supo aguantar los minutos restantes.

Será cuestión de volver a creer. Con todos los problemas que vive, en medio de una etapa de recambio dirigencial, Quilmes se dio el gusto de empezar ganando un certamen que pinta para complicado. Una gran forma de estrenarse, pronto tendrá tiempo para intentar ratificarlo.

Foto: QAC oficial