De a poco y en silencio se fue abriendo un lugar cada vez más importante dentro del rugby profesional. Y todo fue a base de esfuerzo y capacidad. Instalado en Galés desde hace un par de años, a Guido Volpi le llega la primera gran posibilidad con el equipo que posó sus ojos en él cuando daba sus primeros pasos en el Viejo Continente. El Ospreys le renovó el contrato después de haberlo dado a préstamo en la campaña pasada. El forward charló con DQ mientras realiza la pretemporada, a la espera de sumar minutos en la poderosa Liga Pro-14.

“Estamos en pretemporada pero solo tenemos en claro que durante agosto vamos a jugar dos amistosos porque la competencia oficial no está confirmada. La temporada recién arrancaría durante el mes de octubre, así que seguramente se programarán más partidos de preparación”, cuenta Volpi en el arranque de la nota en DQ Radio (FMQ 93.5).

- ¿Ya tuvieron entrenamientos grupales?

- Hace apenas unos días atrás comenzamos a entrenar con el plantel completo. Las primeras semanas fueron en grupos de diez personas, después pasamos a tres grupos de dieciocho jugadores y recién ahora practicamos todos juntos. Es más, hace solo unos días comenzamos a tener contacto entre nosotros, sin colchonetas.

- ¿Cuándo fue el último partido formal que jugaste?

- En marzo. Cuando estaba a préstamo en Doncaster de Inglaterra, ahí jugué el último partido oficial. Obviamente que fue enorme el tiempo que estuvimos parados, por eso la vuelta al entrenamiento fue muy paulatino. Con el correr de las semanas se empezó a levantar la intensidad.

- ¿Tienen muchos protocolos?

- La verdad que tienen todo muy organizado. Desde un principio entrenamos dentro del método burbuja, con la cantidad de jugadores que te contaba. Nos hacen testeos todos los miércoles, que por el momento siempre dieron negativos. En la previa a la práctica, te hacen preguntas, después te toman la temperatura, enseguida te topás con un lugar para dejar tus cosas y lavarte las manos. Además todos los elementos en el gimnasio son individuales y recién después de todo eso nos juntamos a trabajar en el campo.

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- ¿Estás contento del presente que te toca vivir en Ospreys?

- La verdad que siempre me sentí muy cómodo en este club. Jugué muy poco los primeros dos años, por eso imaginé que iba a tener que buscar otro destino. Pero desde que llegué me contaron cual era su proyecto deportivo y ahora se contactaron conmigo y me dijeron que querían renovarme. Obviamente que estoy súper contento, pensá que, aunque no está pasando su mejor época, Ospreys es el equipo más grande de Gales y uno de los más importantes del Reino Unido.

- ¿Renovaste por dos temporadas?

- En realidad, es un contrato uno más uno: en diciembre definen si hacen uso de esa opción y me renuevan hasta el 2022. El problema es que, de acá a fin de año pueden ser muy pocos los partidos que dispute el equipo y después habrá que ver los minutos que tenga en cancha. Pero estoy confiado y voy a aprovechar cada opción en la que pueda jugar.

- ¿La expectativa está puesta en cumplir estos dos años o soñás con algo más?

- Siempre fui muy ambicioso y me tengo confianza para afrontar cualquier desafío. Pero soy consciente de cuál es mi realidad, así que el primer paso es tener más minutos en cancha. Quiero ser tenido en cuenta en este equipo, sabiendo que estoy jugando al más alto nivel internacional. Después de eso, veremos que depara el futuro.