Más de lo que ya se ha visto fue lo que propuso el Mate en su visita a Agronomía. Un equipo que intenta ser prolijo, pero que muestra mucha vulnerabilidad defensiva y que le cuesta horrores ser profundo, al punto que no logra terminar concretando lo que desea. Y sobre todo, ante la ausencia de dos valores que vienen siendo determinantes: Matías Martínez, enganche y uno de los futbolistas con cambio de ritmo, y Camilo Machado, el colombiano no solo es de los que más desnivela, sino que es casi el goleador exclusivo del equipo.

Frente a un Comu necesitado, que venía teniendo un rendimiento desparejo en el torneo, el Criollo volvió a querer plantar su idea… pero le duró poco. Apenas el compromiso y la inteligencia de Franco Sosa y el buen pie de Marcelo Vidal, sobrevivieron por momento a un conjunto que se fue desdibujando por completo con el correr de los minutos. Y el local, que lentamente fue notando ventajas que le daba su rival, dominó por completo a partir que llegó al primer gol.

Iban apenas 21 minutos cuando Angel Luna se plantó cerca de la medialuna y, con un disparo secó que se clavó abajo contra el palo izquierdo del arquero Elías Gómez, convirtió un golazo para poner en ventaja a su equipo. A partir de ahí, las oportunidades se fueron sucediendo, baja el control total del trámite. Pero tuvo que esperar hasta el comienzo del segundo tiempo para ampliar su ventaja.

Fue a los ocho minutos, y en medio de una situación polémica, ya que da la sensación que Ivo Kestler partió un pasito adelantado ante una defensa mate que marcaba en línea y que le dio la posibilidad al delantero de encarar a Gómez en soledad, dejarlo en el camino y pese al esfuerzo de Germán Aguirre por molestarlo, el nueve tocó cómodamente al gol.

El segundo gol trajo un bajón profundo en el partido, ya que Comunicaciones entendió que no debía hacer locuras y cuidar la ventaja y Argentino tardó en volver a arrancar y cambiar de ritmo para tratar de dar vuelta la historia. Apenas un puñado de minutos y mucho por sacrificio y ganas sirvieron para traer algo de riesgo, pero poco más. La victoria local nunca pasó peligro.

Difícil momento para el Mate que, da la sensación, no puede terminar de plasmar en cancha o que quiere y no cuenta con un plan b para modificar rendimientos y resultados. Ultimo en la tabla, y a la espera del próximo partido, la localía empieza a ser vital para salir del pozo.

Foto: Comunicaciones oficial