Nada para rescatar. Y eso es lo que más duele. Porque hay formas y formas de perder un partido y, en este caso, el Cervecero fue vapuleado por un rival que llegaba a los ponchazos, estaba anteúltimo en las posiciones de la zona y ya no pelea por nada en la temporada. Recién a los 38 minutos del segundo tiempo llegó el primer tiro al arco de un equipo que agudizó la gran cantidad de problemas que venía mostrando en las fechas pasadas, en las que el resultado lo acompañaba.

Como ya le sucedió en otra oportunidad, ni tiempo de hacer pie tuvo el QAC. Antes del minuto y medio, un disparo desde media distancia de Juárez (¿floja reacción del arquero?) ya ponía a los locales en ventaja. Y desde allí hicieron lo que quisieron frente a un rival sin contención en la mitad de la cancha, con poca recuperación, sin juego y que quedaba muy largo y estirado cuando intentaba algún ataque.

Encima, pasado el primer cuarto de hora, después de un evidente error de Saracho al querer bajar una pelota tras un centro desde la derecha, Donato lo aprovechó y con un fuerte remate puso el balón en el ángulo. La distancia empezaría a profundizarse cuando Villareal tocó la pelota con la mano, buscando evitar una contra tras un balón perdido en ataque, que dejó al equipo con diez futbolistas antes que se cierre esa mitad inicial.

Pese a los cambios, no hubo reacción ni demasiada búsqueda de Quilmes por el descuento y, volvió a pagar después u balón detenido a favor: contraataque en el que la última línea tiró mal el achique y Mitre, que contó con varias opciones para definir, terminaría colocando el tercero con Toloza.

Con todo definido, apenas si quedó espacio para algún que otro revolcón de Saracho y, sobre el cierre, ya casi en los cuarenta y cinco, otro mal adelantamiento defensivo, mucho espacio para picar por la derecha y otro centro rasante para que, en este caso, Palacios Alvarenga anote el cuarto de la resonante goleada.

Durísima derrota de Quilmes, que en otro contexto podría haber generado una herida casi mortal. Hoy los números todavía lo acompañan y le permiten un mínimo bálsamo, esperando por la recuperación. Necesaria y definitiva, si quiere seguir instalado en la lucha por el ascenso.

Síntesis

Mitre (4): Joaquín Ledesma; Rodrigo Tapia, Nicolás Goitea (ST 33’ Exequiel Narese), Rubén Zamponi, Sebastián Corda; Facundo Juárez (ST 33’ José Torres), Matías Donato (ST 39’ Gianluca Pugliese), Juan Alessandroni, Rodrigo Sayavedra (ST 39’ Ignacio Cechi); Adrián Toloza y Ezequiel Cérica (ST 23’ Pablo Palacios Alvarenga). DT: Gabriel Schurrer. Sup: Cristian Correa, Leonardo Marchi, Germán Voboril y Facundo Pérez.

Quilmes (0): Rodrigo Saracho; Pier Barrios, Rodrigo Moreira, Agustín García Basso, Agustín Bindella (ST Tomás Bottari), Julián Bonetto (ST 20’ Facundo Silva), Matías Villarreal, Brandon Obregón (ST 37’ Camilo Machado), Mariano Barbieri (ST Emanuel Moreno); Federico Anselmo y Mariano Pavone (ST 20’ Tomás Blanco). DT: Facundo Sava. Sup: Esteban Glellel, Rafael Barrios, Ramiro Arias y Martín Ortega.

Goles: PT 1’ Juárez y 18’ Donato; ST 16’ Toloza y 44’ Palacios Alvarenga.

Amonestados: Moreno y Obregón.

Expulsado: PT 36’ Villareal.

Arbitro: Adrián Franklin.

Estadio: Madre de Ciudades.