Pese a que los resultados previos, ya favorecían sus posibilidades, la Selección Femenina de Hockey sobre Césped salió a la cancha a cumplir con su papel y buscar la clasificación en la última fecha de su grupo. Por eso, pudo superar 3 a 2 a Nueva Zelanda, con una buena actuación de la quilmeña Mariné Russo, autora de un gol y una asistencia en la victoria.

El seleccionado nacional tuvo un buen arranque y salió decidido a llevarse por delante a su rival, para tratar de lograr lo más rápido posible el objetivo planteado. Por eso, no llamó la atención la gran cantidad de situaciones de gol generadas, que se vieron cristalizadas a los 11’, cuando, tras un desborde de Russo por derecha apareció Carla Rebecchi y tocó sutilmente, la bocha, que pegó en un poste y entró.

Con el marcador a favor, el equipo se relajó y le permitió crecer a un rival, que no desaprovecho esa ventaja. A los 33’ fue Niniwa Roberts, quien definió, tras una gran jugada combinada. Las cosas quedaban como al principio para la parte final.

Y el segundo tiempo, el desarrollo del arranque iba a tener similitudes con el anterior, pero con una gran diferencia: la contundencia. En un instante Argentina, prácticamente, definió las cosas: primero a los 8’ por medio de Soledad García y luego fue la propia Mariné Russo, quien a los 11’ puso el tercero y definitivo.

Pese al descuento neocelandés sobre el final, a través de Elisabeth Igasan, Las Leonas controlaron las acciones del juego y nunca sufrieron para mantener el resultado. Por eso, desde temprano se pusieron a pensar en Holanda, las grandes candidatas y rivales en semifinales el próximo miércoles.

Se viene la etapa más difícil, pero para estas chicas no hay imposibles. Y están preparadas para intentar seguir haciendo historia.