Argentino sabía que necesitaba el triunfo para encaramarse entre el pelotón de vanguardia, pero no pudo. Fue empate en su visita a la cancha de Juventud Unida, donde se midió frente a Central Ballester. Los dirigidos por Osvaldo Diez levantaron dos veces el marcador, a través de Martín Gardarián y pudieron rescatar una unidad, pese a haber demostrado otro flojo rendimiento colectivo.

Comenzó la gira del Mate. Esa que lo llevará desde éste momento y hasta el cierre oficial del año, de visita por varias canchas de la categoría, exigiendo a fondo al equipo, ya que deberá mantener su condición de candidato fuera de casa.

En su primera salida, visitó a Ballester, en un partido que tuvo la increíble postergación de 24 horas, trasladándolo desde la cancha de FC Urquiza a la de Juventud Unida, donde el elenco Canalla hizo las veces de local. Allí, un Argentino que no pudo mejorar su imagen con relación al partido anterior, apenas pudo rescatar un punto, frente a un rival que aprovechó bien los errores rivales y por momentos fue superior.

Tras el triunfo de Yupanqui del sábado, el Mate salió a la cancha sabiendo que debía hacer lo posible por mantenerse cerca del líder y empezar a darle alcance a sus seguidores. Claro que, todo lo imaginado se cayó rápidamente como un castillo de naipes, producto del gol en contra que convirtió Diego Alcibíade a los 4 minutos de haber comenzado el cotejo.

A partir de ahí, los de Diez debieron luchar contra esa desventaja, que recién podrían levantar en la segunda parte (el primer tiempo de los de la Barranca fue muy malo). Fue a los 8 minutos de ese tramo final, cuando Martín Gardarián apareció por primera vez en el marcador, para dejar las cosas parejas en el marcador.

Aunque, la alegría le duraría apenas diez minutos, tiempo que le bastó a los locales para volver a ponerse en ventaja. Esta vez, fue Adrián Barraza quien parecía darle una estocada dura y definitiva al Mate. Aunque, el equipo se mostró sentido, tuvo la hidalguía para no bajar los brazos y yendo a la carga Barracas llegó al empate definitivo: Lucas Buono desbordó, tiro el centro atrás, y otra vez el armenio Gardarián terminó haciendo inflar la red.

Iban 32 del segundo tiempo, pero de ahí en más nadie se atrevió a seguir arriesgando. Para Argentino fue un punto y nada más. Poco de juego y poco de valor parecen tener este resultado. Aún quedan dos partidos por delante para intentar acomodarse antes del descanso de fin de año, aunque da la sensación que a este paso, va a costarle demasiado transformarse en candidato.