A veces para reír, a veces para llorar. Esa dualidad le permitió al mítico actor argentino, quedar en la retina de todos quienes vieron sus películas. Algo de eso tuvo el cierre de la temporada del Metro para los elencos quilmeños: alegría por la permanencia, por un ascenso a Primera, y la desazón de haber perdido una oportunidad de pelear por el título.

Festejos compartidos

Después de tener que lucharla a lo largo de toda la temporada, los varones de Quilmes B y las chicas del A lograron su permanencia en Primera. En el Repechaje, se sacaron de encima a Banfield y Liceo Naval, respectivamente, y pudieron respirar aliviados.

De las dos llaves, los muchachos fueron los que menos sufrieron. Es que, en el compromiso de Ida consiguieron una buena ventaja de 3 a 1 que les dio cierta confianza para salir a jugar el cotejo definitorio. De cualquier manera, los cerveceros se quedaron con un nuevo triunfo en la Vuelta, en este caso por 2 a 1, que dejó en claro las diferencias entre equipos de diferentes categorías.

Las Damas tuvieron que transpirar un poco más para asegurarse su estadía, porque la serie mostró una clara paridad entre ambas escuadras. Los dos encuentros terminaron 1 a 1, y las cerveceras se quedaron en Primera A por la ventaja deportiva.

Así se acabó el nerviosismo de todo un año, en el que las alegrías escasearon y las dudas sobre el futuro fueron muchas. Pero a la hora de la verdad, surgió dentro de ambos grupos, el temple necesario para revertir la historia.

Sueño trunco

Se acabó la ilusión de Quilmes A por llegar a un nuevo título. No pudo contra Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, que lo venció por 4 a 2 en una de las semifinales de los Playoffs.

Hasta esa instancia llegaron los dirigidos por Mariano Ronconi en su ilusión por repetir los torneos logrados hace apenas un par de años atrás. El rival terminó sintiéndose más cómodo al jugar en su propia cancha (allí se define todo el torneo) y logró derrotarlo con la contundencia de su maquina ofensiva, que empezó a aparecer nuevamente en este tramo final de la temporada.

En el otro cotejo, Mitre venció a Ducilo por el mismo marcador, y accedió al cotejo definitorio. Pero como lo perdió ante GEBA, ahora habrá una final de desempate que consagrará a uno de los dos.

Una vuelta esperada

Quilmes High School A pudo sacarse la espina después del descenso sufrido la temporada pasada y hoy festeja su vuelta a la elite del hockey metropolitano. En un partido disputado en el Anexo Cervecero, los dirigidos por Walter Di Nardo vencieron a Banfield por 3 a 1 en la final de los Playoffs y pudieron dar la esperada vuelta olímpica.

Fue un proceso duro pero de rápido retorno. Los de la Ribera debieron batallar a lo largo de todo el año en una división complicada, pero siempre demostraron estar un escalón por delante del resto y se ganaron merecidamente su posibilidad de jugar la instancia definitoria.

Allí se toparon los dos mejores conjuntos, sin discusión. Pero el QHS mostró el peso de sus individuales y venció con total justicia.

Ahora llegó el tiempo de los festejos, pero ya pensando en un 2011 en el que su gran desafío será hacer que su estadía en la A no sea pasajera.