Por Leonardo Testa

Abel y Gabriel Encinas fueron los autores de los goles en la importante victoria de Quilmes sobre Ciudad. El Cervecero encontró en la eficacia de los fijos, la gran virtud para llevarse el encuentro. De cualquier manera, aunque sumó tres puntos valiosos para la tabla de posiciones, quedan muchos aspectos de su juego para analizar y corregir. Por ahora disfruta como escolta del líder Mitre.

La intensidad de la lluvia hizo cambiar la cancha principal por la cancha dos, que tiene mejor drenaje, para que se pueda disputar el encuentro entre QAC A y Ciudad A por la décima fecha del Metro. Y si bien el local era el Cervecero, Muni contó con la ventaja de conocer las canchas de agua, por eso sus jugadores se adaptaron más fácilmente a los movimientos de la bocha.

Por eso, no llamó la atención que la visita arrancara mejor, presionando la salida, y aprovechando los flick para jugar a la espalda del mediocampo del elenco dirigido por Mariano Ronconi. La primera jugada fue a favor de la visita. Un desborde por derecha de Ignacio Manes causó cierto peligro para el arco defendido por Leandro Zenatto, pero los delanteros de CCBA no lograron empujar la bocha.

Pero a los 13 minutos, en el primer fijo a favor del local, el goleador del Metro, Abel Encinas se estiró desaforadamente para empujar la bocha tras el rebote que había dado el arquero Lautaro Díaz, y de esa manera decretó el primer gol del encuentro. Igualmente, el festejo no iba a durar mucho para Quilmes, ya que cuatro minutos más tarde, el equipo dirigido por Carlos Geneyro le copió la fórmula y a través de un corto, empató el encuentro. Fernando Oscaris sacó un fierrazo potente que se desvió en un palo de la defensa y la bocha pasó la línea de gol.

A partir de este momento, la visita volvió a dominar el encuentro, tenía jugadas de gol que no concretaba. En cambio, los cerveceros no lograban hacer tres pases seguidos, mostrando complicaciones en la tenencia de la bocha. De cualquier manera, la suerte estaría de su lado…

A cuatro minutos del final de la primera etapa, Guillermo Muir se escapó por el sector izquierdo, desbordó y cuando envió el centro, entre el arquero y la defensa introdujeron la bocha adentro del arco generando de esta forma, un gol en contra y el 2-1 transitorio de ese momento.

La segunda etapa fue un calco de la primera, el equipo de Geneyro (se fue expulsado por protestar) salió en busca del empate, pero sus delanteros seguían sin fineza para definir, aunque al presionar la salida lograban cortar los avances y contraatacar rápidamente. Por su parte, Quilmes le cedió la iniciativa a su rival, apostando al contraataque, aunque no fueron muchas las chances que tuvo por esa vía.

Hasta que a los 9 minutos, apareció Abel Encinas para poner el 3-1: a la salida del tercer corto a favor del equipo, el Gordo clavo el remate que comenzó a decretar el rumbo del juego.

Muni buscó el descuento, tuvo cuatro fijos a su merced, pero las salvadas en la línea, un penal no cobrado, y las atajas de Zenatto no permitieron que el resultado se modificara.

Quilmes A no jugó uno de sus mejores partidos pero le alcanzó para seguir prendido. Ganó por ser eficaz y porque en su equipo cuenta con los hermanos Encinas, que abrieron y cerraron un encuentro importante para no perderle pisada al invicto Mitre.