Valió la pena esperar una semana más para que sus equipos salgan a la cancha. Luego de postergar sus juegos de la fecha inicial, los elencos de Mayores de la Asociación Alemana consiguieron dos muy buenas victorias ante sus similares de River, para darle inicio de la mejor manera a la temporada 2013. Tanto los varones como las mujeres, tuvieron trámites de juego similares y terminaron imponiéndose por casi el mismo marcador a la hora de la chapa final. Buena manera de debutar.

El reencuentro del campeón

Se trataba del partido de la fecha, ya que estaban frente a frente el último campeón y uno de los máximos aspirantes a la corona. Pero jugando mejor que su rival, los Alemanes demostraron su superioridad ante el siempre complicado River y se llevaron el encuentro por 28 a 22. Los quilmeños lograron quebrar el marcador sobre el final para terminar sacando una ventaja de seis tantos.

La primera etapa fue pareja. La AACFQ se veía mejor, jugando bien en ataque, mejor en defensa y de manera ordenada. Por su lado, los de Núñez se veían desdibujados, con pocas ideas y cometiendo distintas pérdidas que lo sacaban del partido. Sin embargo, el tablero del entretiempo marcaba paridad en el partido: 11 a 11.

En los segundos treinta minutos, el local estuvo siempre arriba por uno o dos tantos. Con un muy buen trabajo de Facundo Torres en ataque, los de Cristian Gull se hicieron más fuertes y lograron el quiebre promediando la segunda etapa, basándose principalmente en el contraataque.

De esta manera, cosechó tres puntos importantes y dejó a River con esa misma cantidad, ya que el Millonario venía de igualar con Lomas en la primera jornada.

Arrancaron con todo

En lo que fue su primera presentación en este Metro Apertura, tras no jugar ante Estudiantes de La Plata en la fecha inicial, las Alemanas vencieron a River por 29 a 22. Los primeros minutos fueron sumamente parejos, el ataque millonario se apoyaba completamente en Daniela Ciuccarelli que se cansó de complicar a la defensa rival con sus lanzamientos.

Por suerte para las quilmeñas, Gull supo ajustar a tiempo las clavijas y a partir de allí, comenzaron a salir rápido de contra. Por esa vía se retiraron al entretiempo ganando por seis tantos. Durante la parte final, la visita sacó una personal sobre la joven armadora Elke Karsten, lo que desarmó al ataque quilmeño y le permitió recortar la brecha. Pero nunca pudieron frenar las salidas rápidas, que terminarían siendo letales para el triunfo de la Asociación Alemana.