Unión Ezpeleta tuvo un nuevo traspié en el denominado Grupo de la Muerte del torneo de Segunda División de la AFA. En cancha de América del Sud, cayó derrotado por 7 a 5 frente a Jorge Newbery, un rival que le es siempre muy difícil de superar y que empieza a transformarse en su sombra negra de los últimos tiempos. Se trata de la segunda derrota consecutiva del equipo, en un campeonato en el que había arrancado en gran forma y que ahora lo ve ubicado en el cuarto puesto de la tabla en el Grupo D.

Si bien la mayor parte del tiempo transcurrió con mucha paridad, Newbery encontró el desnivel del juego en un pequeño lapso del segundo tiempo, que terminó marcando la diferencia final. Al igual que en partido anterior, a los de Ezpeleta les volvió a costar mucho sostener la ventaja en el marcador, cada vez que se pusieron arriba. Y el costo a pagar fue muy alto, ante un rival de gran jerarquía como el que le tocó enfrentar.

Durante el comienzo de la primera mitad, el local fue el que le imprimió el ritmo al partido. Con una buena defensa zonal, más el muy buen pie de la mayoría de sus jugadores, se fue armando en agresividad y contundencia. Sin embargo, la visita contó con más efectividad al arrimarse al arco contrario. Y así Ignacio Santos abrió el marcador, entrando en el segundo palo con la cabeza.

Todo pasó a estar bajo control de los de Ezpeleta, luego de la apertura del marcador. Hasta que en una polémica jugada (Marcelo Pace se llevó por delante a un rival, cuando la pelota ya estaba cerca de mitad de cancha), la dupla arbitral sancionó un penal, con el que conjunto local llegó al empate. Pero cerca del ocaso de la primera mitad, Unión también tuvo su oportunidad desde los seis metros. Mirko Denda se hizo cargo del penal y con mucha potencia selló el 2-1 con el que se fueron al descanso. Después del festejo, Newbery se quedó con uno menos por la expulsión de Emiliano Scocchera, aunque la visita no pudo aprovechar esos dos últimos dos minutos para ampliar la ventaja.

En el complemento, el local se puso el despertador bien temprano y madrugó a los de Ezpeleta en el primer minuto. A pesar del rápido empate, Unión no se derrumbó. Incluso siguió con una intensa y dinámica rotación de pelota y posiciones. De esta manera, poco a poco fue arrinconando a su rival. Y, ahí, apareció Carlos Pacín para marcar el tercero. Igual que en partido anterior (derrota 8-7 ante Villa La Ñata), al equipo dirigido por Marcelo Calahonra le significó mucho no poder aguantar la ventaja. Al minuto, los locales volvieron a empatarlo. Herido en su orgullo, la visita volvió a ir por todo. De esta manera, Leo Beli, que volvió a vestir la camiseta del equipo tras siete años, se anotó en las redes.

Pocos instantes después, sin encontrar la cura a su mal, Unión recibió el empate. Y mientras promediaba la etapa le dejó sin barreras los caminos a los de Newbery, que se sobrepusieron en juego y en espacios. Consecuencia de eso, a falta de seis minutos para el cierre lograron desnivelar, sacando dos tantos de ventaja.

En ese momento, para colmo, los Ezpeleta perdieron a una de sus piezas clave, ya que su arquero (y capitán) Pablo Penovi se fue lesionado con una distención de rodilla, que lo mantendrá alejado de las canchas al menos un mes. Con Juan Bianchi en su reemplazo, Calahonra le pidió al arquero que sea un atacante más. Y así pudo quedar a uno del empate, tras un rebote que Denda pescó en el área.

Igual no alcanzó. En los últimos minutos, las ansias del empate le jugaron en contra a la visita que con Bianchi adelantado, recibió el séptimo y definitivo tanto.