El amor por la pelota los llevó desde muy pequeños a alejarse de sus hogares para comenzar a perseguir sus sueños. Ambos categoría 98, rápidos y habilidosos, abandonaron su Japón natal para radicarse en Barcelona. Allí, realizaron inferiores en dos clubes de la zona y dieron inicio así a su camino de futbolistas. Masatou Chiba -cuyo puesto es enganche ó 7- y Kazuki Date -va por la banda como 11 u 8- ahora se encuentran alojados en la pensión de Independiente y, entre sonrisas tímidas y un marcado acento ibérico, le cuentan a este cronista cómo sus ilusiones se instalaron en Argentina y ya sueñan con debutar en el Diablo de Avellaneda.

- ¿Qué sensaciones tienen acerca de esta posibilidad en el fútbol argentino?

- Masatou Chiba: Me dieron la oportunidad de probarme en Independiente y decidí que tenía que aprovecharla para intentar alcanzar mi sueño. Así que hice las valijas y vine.

-Kazuki Date: En España había problemas de FIFA y no podían fichar a los menores de 18 años, así que ya no podía jugar. Me explicaron que en Argentina, incluso antes de fichar, podría tener la chance de jugar, entonces no lo dude.

- ¿Cómo llegaron a jugar en España?

- KD: Viaje a probarme totalmente solo. Jugaba en el Club Europa, el cual en nuestra categoría, compite en la misma división que el Barcelona.

- MC: Arribé a España supuestamente por unas semanas cuando tenía 11 años y, como me gustó el estilo de juego de allá, terminé quedándome cuatro años. Jugaba en Sabadell, un equipo de Segunda División. Con Kazuki nos hemos enfrentado tres veces y estamos igualados, con un triunfo por bando y un empate (risas).

- Ya entrenaron con chicos de acá, ¿vieron alguna diferencia con respecto a lo que estaban acostumbrados?

- KD: Lo primero que noté es que, como en Argentina hacen mucho físico, todos son muy fuertes… ¡y pegan mucho!.

- MC: Sí, ya me dieron bastantes patadas. Por eso el técnico me pidió que tire menos fantasía, menos tacos y sombreros (risas). Ahora juego más simple, a dos toques.