En un cotejo muy cuesta arriba para el elenco cervecero, tocó sufrir y soportar la arremetida de los cordobeses para luego golpear en el momento justo y así, de una forma tan simple pero tan poco ortodoxa o como no señalan los manuales, cortó con un largo tiempo sin ganar de visitante.

La primera etapa mostró un dominio total por parte de Racing, con llegadas claras y una intensidad sostenida ante la pasividad y los errores de un QAC al que le costaba tener la pelota. Después de varias llegadas que el local no pudo concretar, el partido cambiaría por un ratito, que sería clave para el desarrollo final. Es que, a los 33 minutos, el lateral derecho Santiago Rinaudo se fue expulsado por doble amarilla.

Rápidamente a los 40 minutos, y luego de una pelota parada mal rechazada por el fondo local, el paraguayo Brahian Ayala remató al área, ese mismo envío fue pifiado por Julián Bonetto, pero sirvió para habilitar a Martín Río que, arrojándose al suelo, terminó desviando la pelota y convertir el que sería el único tanto del juego.

La parte complementaria fue un calco de la primera mitad, con llegadas aisladas y claras del conjunto local llevándolo por delante a los dirigidos por Mario Sciacqua. Esto recrudeció a los 20 minutos, cuando Gabriel Díaz fue expulsado con roja directa por una falta en el borde del área, lo que llevó a que el equipo sufriera por demás hasta el cierre del encuentro.

Así, de una forma poco tradicional, Quilmes llegó a las 27 unidades, ubicándose en el cuarto lugar de su zona, a siete del líder Independiente Rivadavia al momento de culminar la primera rueda. Después de un descanso de una semana, comenzará el semestre crucial para un equipo que sigue teniendo una deuda notoria desde la propuesta y el juego.

Foto: QAC oficial