- ¿Te sentís cómodo con el rótulo de ser “una leyenda”?

- No lo sé, es algo raro (Risas). Siempre me consideré solamente un skateboarder: crecí como todos, andando en las calles, y todo lo que vino después simplemente pasó. Obviamente soñaba con convertirme en Pro. Admiraba a Tony Alva, Jay Adams, Steve Olson… y llegar a estar en la misma liga que ellos fue algo muy loco. ¿Una leyenda? Saco a pasear al perro, lavo los platos, soy un tipo normal. Lo único que puedo decir es que patiné toda mi vida.

- Con todos estos años dentro del deporte ¿cómo ves al skate actual?

- Sigue poniéndose mejor y mejor. El skate de Bowl es cada vez más extremo y en todo el mundo todos son muy radicales. Existe un skateboarding que ves por la tele, como los X Games y esas cosas, pero patinar en lugares como este, con tus amigos, es lo que para mí sigue siendo este deporte. Conocer gente nueva y escuchar sus historias. Eso es lo más importante. Estos últimos años estuve viajando mucho y no hice otra cosa que sumar nuevos amigos y gracias a FaceBook e Instagram puedo mantenerme en contacto con ellos. Al conocer a otro skater te da la sensación de conocerte de toda la vida, porque todos crecimos de la misma manera.

- Acabas de ver andar a varios locales (NdeR: Chuis Maneiro, Pico Piccardi, Pato Barreto y el marplatense Milton Martínez) ¿qué te parecieron?

- ¡Zarpados! ¡Son increíbles! Fue una sesión extraordinaria. Ya estoy viejo, tengo 47 años y dos rodillas muy lesionadas -el tiempo les pasó factura muy duro-, así que ahora solo entro y salgo rápido del bowl. Cuando estuvimos en Brasil metimos dos demos por día durante siete días y en casa solo patino una vez a la semana en el skatepark de Santa Monica (Risas), así que estuve mucho más activo de lo que últimamente acostumbro y mis rodillas me están matando. Pero toda la gente acá ha sido extremadamente amable conmigo, fueron increíbles y, aunque no creo que me lo merezca, lo agradezco de corazón.

- En este skatepark funciona una escuelita a la que vienen niños de tan solo 5 ó 6 años ¿qué consejo le darías a un chico que recién empieza a patinar?

- Principalmente, que aprovechen su juventud porque cuando los años pasan no vas a andar tan bien como solías y te va a doler todo (Risas). Diviértanse lo más posible porque volverse famoso no es lo importante, lo que más valor tiene es disfrutar de sesiones como estas, con los locales, con tus amigos. Ni toda la gloria ni el dinero pueden compararse con esto.