Tal como se preveía en la previa, luego de la reunión que mantuvo en el Congreso de la Nación con el presidente cervecero Aníbal Fernández, Ricardo Caruso Lombardi confirmó que dejará de ser el entrenador de Quilmes, pese a que logró que el club no descienda a la Primera B Nacional. Según el propio entrenador, el motivo de la partida fue la diferencia económica entre lo que pretendía y lo que le ofreció el club. Ya se busca reemplazante.

Caruso Lombardi dejó de ser el director técnico del Quilmes Atlético Club tras la reunión que mantuvo en el Congreso con el presidente, Aníbal Fernández; el vice, Andrés Meiszner y el tesorero Carlos Alonso.

Resignado, pero sin las estridencias habituales de sus discursos, pasado el mediodía Caruso explicó los motivos de su salida del club: “Llegamos a un acuerdo para irme. Tienen deudas muy grandes y no tienen cómo pagarme. Yo pretendía seguir ganando lo mismo que venía ganando. Con el presupuesto que tienen no les queda plata ni para salvar el equipo”.

Más allá que se rumoreaba un pedido de aumento a sus cifras, el técnico fue claro que “nunca se me cruzó eso por la cabeza, pedí seguir con lo mismo. Pero hay una deuda de dos meses y medio y el premio. Los dirigentes quieren recortar todo y está bien”, afirmó. Por último, se mostró conforme con lo logrado en el semestre: “Fue un gusto enorme poder zafar a Quilmes y que mi relación con el hincha se termine como se dio. Ojalá algún día tenga la posibilidad de volver”, comentó.

Ahora comenzará la carrera por la sucesión, en la que hay muchos candidatos, aunque haya algunos que piquen en punta. El elegido asumirá el próximo 16 de junio, fecha en la que el plantel deberá regresar de las vacaciones.