Era el partido de la fecha y, quizás, uno de los más importantes del campeonato. Más allá de la seguidilla que se vendrá de acá en más, con cruces permanentes entre los conjuntos que comandan la tabla de posiciones, para Argentino de Quilmes el triunfo ante Dock Sud como visitante significa la consolidación absoluta de su candidatura al ascenso directo. En un trámite de ida y vuelta en el que los dos tuvieron sus chances, pegó en momentos justos para quedar solo en la cima.

Mucha expectativa en la previa, teniendo en cuenta que se cruzaban dos de los elencos de mejor presente en la Primera C y que llegaban igualados en las posiciones. Más allá de especulaciones sobre qué actitud iban a tener en el campo, teniendo en cuenta que ambos se ubican en puestos de ascenso directo, el partido fue entretenido y los mostró a ambos decididos a ir en búsqueda de los tres puntos.

El local fue superior durante la primera parte de la etapa inicial, hasta que los dirigidos por Monzón comenzaron a soltarse. Un disparo en el palo de Matías Martínez a diez del cierre, fue el despertador necesario para demostrarse que el triunfo era posible. Y no tuvieron que esperar mucho más para ponerse en ventaja: a los 45 minutos, un golazo de Franco Cristofanelli, que volvió a hacer gala de su técnica con el balón, lo puso en ventaja.

El segundo tiempo fue dramático y emocionante a la vez. Con el Docke que por momentos tenía el rol protagónico, un poco por obligación y otro porque el Celeste se sentía más cómodo defendiendo la ventaja y apostando a alguna contra de peligro. Y si bien, opciones hubo en los dos arcos, hubo que esperar hasta el descuento, sobre el pitazo final de Juan Pablo Lousteau, cuando el ingresado Brian Duarte puso la sentencia definitiva en el tanteador.

Triunfazo que se festeja con fuerza en la barranca. Sexta victoria consecutiva y la firma convicción que el equipo está preparado para intentarlo de nuevo. El Mate va por el ascenso directo, ya es una realidad.

Foto: Mate Eterno