Uno de los mayores interrogantes dentro del futuro cercano de Quilmes, es el tema económico. El club bajó de categoría con una deuda que supera los 6 millones de pesos, que le adeuda los sueldos de mayo y junio al plantel, sumado al premio por el ascenso. Queda claro que la plata no sobra en las arcas del Cervecero. Todo lo contrario, la dirigencia deberá intentar encontrarle una solución a un problema que puede ser decisivo para su futuro cercano, también en lo deportivo.

Los ingresos por televisión se debilitan notoriamente con el cambio de categoría, y ese era el bastión económico más importante para acomodar las finanzas. Pero, de cobrar 17 millones de pesos en Primera, pasará a los 4 millones (un presupuesto aproximado de 400 mil pesos por mes) en la B Nacional.

En medio de esta complicada actualidad, la Comisión Directiva tuvo sus primeros encuentros informales. Primero lo hizo el bloque oficialista y más tarde lo hizo solamente el sector anibalista con algunos integrantes de la oposición (Opción por el cambio y la Lista Blanca). Además, se especula con una reunión formal para el próximo lunes. Una de las explicaciones de la demora en la concreción de la misma, es la apretada agenda que tiene por estos días el Ministro Aníbal Fernández.

Caruso, por si o no

Será un fin de semana clave en la definición del entrenador. Después de haber dejado clara cual es su postura y de días en las que debió dedicarle espacio y tiempo a cuestiones personales que está atravesando, Ricardo Caruso Lombardi deberá tomar una decisión final.

El interés de seguir dirigiendo en la Primera División, dificulta seriamente la posible continuidad del entrenador. Más allá de eso, se lo pretende seducir manteniéndole casi en su totalidad el mismo sueldo que el cuerpo técnico (sus integrantes serán claves en la decisión final) venía ganando durante estos meses.

En caso que la respuesta negativa, comenzaron a barajarse nombres, entre los que aparecen los de Blas Armando Giunta y de Felipe De la Riva, este último conductor de Deportivo Merlo, de buenas campañas en estas temporadas en la B Nacional.

Por otro lado, será necesario empezar a definir la situación de muchos de los jugadores que integraron el pasado plantel y que, en muchos casos por su alta cotización o por las deudas que se mantienen con sus dueños, difícilmente puedan continuar.